Trabajar con esquemas

Como persona encargada de dirigir a un grupo con unos propósitos teatrales, conviene trabajar con una especie de ESQUEMAS, esquemas de voz, esquemas gestuales y esquemas espaciales. Bien, lo que entiendo por esquema es una especie de idea concreta previa, es decir, mental, que sirve de guía a la acción en escena. Intento explicarlo con un ejemplo del montaje de AISLA2. Un esquema espacial sería, por ejemplo, el que tiene que trabajar un personaje como WINNY, cuyo esquema básico espacial consiste en siempre ocupar el lugar preponderante de la escena, incluso reaccionar cuando alguien ocupa esa lugar. De modo que su esquema espacial es siempre ocupar el lugar preponderante de la acción, que no necesariamente tiene que ser el central, no, en escena el lugar preponderante puede estar en cualquier lugar, el cual se puede crear con iluminación, o puede ser creado por los actores. Así, en AISLA2, hay un lugar que crea la iluminación, LA ZONA DE DEBILIDAD, muy importante para el desarrollo argumental de la obra, que está fuera de la escena, en el borde del espacio ficticio. Es un lugar a medias entre la ficción y la realidad que, para el desarrollo de la acción es básico. Bien, respecto a esquemas de voz, un personaje como CRISTINA, que representa MARÍA JESÚS SÁNCHEZ, tiene que utilizar un esquema sobretonado de voz, por encima del resto, y con un timbre robótico; se trata de un personaje que presuntamente pone la organización del PROYECTO ISLA DOS, de modo que su voz robótica refleja las intenciones deshumanizadas de los responsables del proyecto. Ese es su esquema de trabajo. Los esquemas guían, nunca determinan, son ayudas de planificación necesarias, y más en el mundo del teatro donde todo está calculado, pero no son esquemas determinantes. El reflejo tradicional de esto son las marcas que se hacen en el escenario para la colocación de la escenografía. Nosotros rechazamos estas marcas, porque eso puede resultar excesivamente planificado, determinante. El esquema guía pero, una vez asimilado, debe ser flexible, es más, debe hacerse creativo, es decir, abierto a la libertad creativa. Muchas veces, algunas malas asimilaciones de determinadas estéticas contemporáneas, predican una libertad absoluta de los actores en acción: esto nos parece un gran error, igual que es un descalabro ético pregonar la libertad absoluta sin antes haber interiorizado algunas "obligaciones necesarias". De modo que los esquemas son guías para el trabajo y también pautas imprescindibles para llegar a una creatividad más sólida y significativa. Seguimos trabajando.